LA ESTRUCTURA DEL CLIENTELISMO
Tercera Parte
Guadalajara de Buga 22 10 2011
Los compromisos que los políticos tienen con sus patrocinadores les hacen imposible cumplirle al pueblo que los elige. Eso ya no tiene remedio.
La redención social sobre la que cabalgan las campañas, la vivienda para los pobres, los cientos de nuevos empleos que prometen a través de discursos, radio, televisión y periódicos hasta la saturación del electorado, hace rato se convirtieron en folklóricos concursos de mentirosos.
Si hubieran cumplido siquiera la mitad de las promesas que los alcaldes han hecho en los últimos 23 años a Guadalajara de Buga, Buga sería “La mejor ciudad intermedia de Colombia”.
Estaríamos vendiendo productos manufacturados de alta calidad a precio competitivo; habrían talleres metalmecánicos, de herramientas de construcción, de accesorios en acero, bronce, aluminio e inyectados de plásticos; tendríamos uno de los centros de convenciones más importantes de Colombia, con zona hotelera de primer nivel; tendríamos no sólo la más antigua sino la mejor feria agropecuaria y ganadera del país; gozaríamos del puerto seco; tendríamos más de la mitad de la construcción de la carretera a los llanos orientales con conexión a Venezuela, y la variante a Bogotá; poseeríamos una economía globalizada con negocios internacionales; seríamos ciudad bilingüe español e inglés, con énfasis en mandarín; seríamos uno de los centros médicos y de estética más importante del país, e incluso de Sudamérica –recuerden que aquí tuvimos una de las primeras facultades de medicina de Colombia-; tendríamos las sedes adecuadas para deportes extremos; seriamos potencia futbolera, con equipo propio; disfrutaríamos de un Estadio municipal ampliado y completo; hace rato habríamos construido un Patinódromo de estándares internacionales; poseeríamos una piscina olímpica con estructura para clavados; habríamos apoyado la construcción de gimnasios de primer nivel para Pesas, Potencia, físico-constructivismo y artes marciales; habríamos construido el puente del Palacé o del Palo, conectando el Norte con el Sur por el oriente; no tendríamos déficit en vivienda; se habrían construido todas la PTARES; estarían construidas las plantas de potabilización de la zona rural; se habría hecho la modernización y ampliación de la planta de acueducto; estaría organizada la galería satélite y sería un centro comercial alterno con precios competitivos y agradable para la ciudad; gozaríamos de una alcaldía ampliada y cómoda, tanto para ciudadanos como empleados; El Concejo municipal tendría su propio edificio o estaría ampliado con un gran salón de sesiones que permita la participación cómoda y democrática del pueblo; Aguas de Buga habría restaurado una gran casa vieja en el centro, para sus instalaciones, revitalizando el sector histórico; Buga y la región gozaría de un malecón multifuncional de río Guadalajara con corredores para peatones, atletas, ciclo vía, patines recreativos, heladerías, restaurantes, ágoras, arboledas etc.; estarían terminados los emisores finales; se habría mejorado la infraestructura de escuelas y colegios; no se habría ido Carulla de la ciudad y tendríamos almacenes de grandes superficies con todas sus instalaciones en la ciudad Milagro; seríamos una ciudad universitaria con posgrados en arquitectura restaurativa y conservación, en jurisprudencia, y archivo; tendríamos uno de los centros de investigación en Historia de la Colonia más importante de Colombia, con proyección internacional; seríamos despensa agrícola con variedad de cultivos en pepas, frutas y algodón; tendríamos un centro turístico religioso de nivel mundial, con hoteles, restaurantes, y zona rosa de alto nivel; habríamos desarrollado nuestra vocación de ciudad industrial; tendríamos una Cámara de Comercio competitiva y democrática trabajando para todos; existiría Fenalco; el Teatro Municipal estaría hace rato dentro del ciclo de teatro, ópera, opereta, nacional y Suramericano; tendríamos uno de los centros de conservación arquitectónica y urbanística de nivel nacional e internacional; estaríamos compartiendo el aeropuerto con la ciudad de Tuluá o tendríamos el propio; gozaríamos de internet gratis en toda la ciudad o por lo menos en lugares públicos; el Hospital San José sería uno de los más importantes de la región y el país, con investigación científica de avanzada; el Hospital del Norte sería un ejemplo de institución eficiente y decente al servicio de los más pobres, y no una cloaca de la salud y foco de corrupción y clientelismo.
Y sobre todo tendríamos dignidad, estaríamos orgullosos de nosotros y de nuestros gobernantes, no pasaríamos pena ajena… y lo más importante, tendríamos a nuestros mejores hombres y mujeres trabajando en Buga y para Buga, y no en Cali, Bogotá o en el exterior etc. etc.
Guadalajara de Buga estaría jerarquizada por lo alto, y no chapuzando en la mediocridad, la viveza, corrupción, clientelismo, en las amenazas y el barro del miedo. Con lo que se habríamos reducido nuestra dependencia a las remesas del exterior que los bugueños y bugueñas emigrados mandan generosamente para sostener a sus familias, porque la ciudad no puede, y estos giros estarían usándose para generar riqueza, no sólo para apagar el hambre en que nos tiene sumida la corrupción.
Soñar no cuesta nada ¿es un sueño imposible? ¿an impossible dream? No, no lo creo así, lo que hemos hecho es cumplirle el sueño egoísta y ambicioso a la minúscula clase politiquera, convirtiendo estas mediocridades afortunadas en faros de la “moral”, “la eficiencia” y “la inteligencia”, pues con su incapacidad evidente, se frenó e impidió cumplir el sueño de la Ciudad Señora… Habríamos conseguido la prosperidad, estaríamos consolidados como la mejor ciudad intermedia del país y seríamos líder en el concierto de municipios colombianos, ganándonos el respeto de Bogotá DC. y de nosotros mismos, estaríamos dejando no sólo una ciudad posible, sino un buen ejemplo a las nuevas generaciones…
Continúa…
