viernes, 16 de noviembre de 2012

“Nuevos Decanos Uceva 2012”



HOV 1908 16 11 2012. Tuluá, 16 de noviembre del 2012.
Carta Abierta: A la comunidad universitaria de la Unidad Central del Valle del Cauca –UCEVA-

“Nuevos Decanos Uceva 2012”

-Clap, clap, clap- Felicitaciones al señor Rector y su cúpula, acaban de consolidar su poder. ¿Se preguntarán porque no felicito a los nuevos decanos…? Apenas ayer me he enterado de la designación por parte del Consejo Directivo, incluso no sabía que cambiaron los Estatutos para pasar de elección a designación de decanos por facultad, algo así. Esto era algo necesario dentro de la estructura académica, la Uceva no podía seguir permitiéndose la existencia de varios “rectores” dentro del claustro.

También me comentaban efusivamente que uno de los "burros" de la Uceva perdió su amarradero, con los estragos académicos que le causó a la facultad y a la Institución no era para menos, este "piernipeludo" estaba pasado de pasarlo al apretadero. Hace rato los profesores y alumnos debían haberlo hecho, pero le tenían pánico a sus coces… a no ser que las directivas piensen amaestrarlo para vicerrector… nunca se sabe.

Porqué estas expresiones vernáculas de mi parte para definir problemas de una organización de alto nivel, es que no da para más, y es una manera clara y castiza de describir una pequeña entronización. Con estos cambios, los largos brazos de la rectoría finalmente llegaron a todas las aulas de clase, y así debe de ser –aunque muchos no estén de acuerdo-. Ahora sólo les resta dos cositas: desterrar el último reducto de oposición, acabando definitivamente con todo indicio de intelecto, expulsando al envejecido y parapléjico pensamiento en la Uceva, y desmantelar al Sindicato. Los jurídicos pueden estar “preparando las indemnizaciones”, o tal vez sea también una tarea de la vicerrectoría académica, -para algo debe de servir este puesto burocrático-. Y se tendría entonces por primera vez en la institución, una “Tormenta Perfecta”.

Los nuevos decanos deben olvidarse del poder, y concentrarse exclusivamente en lo académico. Por más que se planeen “medidas de transparencia” en la oscuridad, siempre habrá una pequeña luz de esperanza que no depende de nada ni de nadie, y por alguna razón ajena a directivos ustedes fueron los escogidos, y así dependan en todo exclusivamente del rector,  tienen una responsabilidad incuestionable con alumnos y profesores, veamos: Un buen decano debe ser excelente profesor, a veces padre, a veces sargento, escritor y a veces bufón, payaso, crítico, sacerdote o último asidero. Todos esos papeles caben, según el profesor y escritor McCourt, en la dura piel de un docente.

Un decano debe ser comprensivo y generoso, no tener miedo de enfrentar la monolítica estructura administrativa para defender su facultad, para defender sus profesores y estudiantes. Ser capaz de sacar un profesor cuando este no lo es, por más palanca que tenga, y proteger al bueno, así no se lo trague. Capaz de combatir las políticas de los políticos que dicen sin saber cómo deben enseñar los profesores, y como deben aprender los estudiantes. Estar apasionado por su profesión, más que por el sueldo; hacer hasta lo imposible por mejorar la imagen desteñida del pedagogo, y que los docentes entiendan que deben formar pensamiento crítico e independiente en los estudiantes, sin que éstos solo piensen en los exámenes y notas, por miedo… de esta manera se puede formar conocimiento firme, y estudiantes autónomos –suerte-.

Hernán Ordóñez Valverde.  
Ex-Profesor Hora Cátedra Uceva.